El Castillo de La Mota, ubicado en Medina del Campo, Valladolid, España, tiene sus orígenes en el siglo XV, aunque se sabe que existió una fortaleza previa en el mismo lugar desde el reinado de Pedro I. Durante el reinado de Juan II se inició la construcción del castillo actual, aprovechando las antiguas murallas medievales. Fue Enrique IV quien finalizó las obras del recinto interior y la torre del Homenaje, y posteriormente los Reyes Católicos lo fortificaron con una galería de tiro subterránea y un foso, convirtiéndolo en una de las primeras fortalezas de Europa adaptadas al uso de la artillería.

Además de su importancia militar y arquitectónica, el Castillo de La Mota alberga numerosas historias y sucesos, como su función como archivo de la Corona, el encierro de la princesa Juana y la huida de César de Borgia, entre otros. A lo largo del tiempo, el castillo cayó en desuso y fue restaurado a partir de su declaración como Monumento Nacional en 1904. En la actualidad, es propiedad de la Junta de Castilla y León y se utiliza para actividades culturales y turísticas. La Consejería de Cultura realiza cursos y conferencias, mientras que la Concejalía de Turismo organiza visitas guiadas desde el Centro de Recepción de Visitantes inaugurado en 2007.

El Castillo de La Mota combina su valor histórico con la oferta turística, brindando a los visitantes la oportunidad de explorar el recinto fortificado, conocer su yacimiento arqueológico de la Edad del Hierro y obtener información sobre otros puntos de interés en la zona.