La historia de la calle López Gómez, en Valladolid, se remonta a 1882 cuando se propuso abrir una vía que conectara el Campillo de San Andrés (actual Plaza España) con la Plaza de la Universidad. Aunque hoy parece una tarea sencilla, en ese momento, la calle se encontraba ocupada por varios edificios importantes.

El solar que ahora alberga el Colegio García Quintana solía ser el lugar del convento de San Norberto de los Canónigos Regulares Premostratenses. En el plano de Ventura Seco de 1738, se observa claramente que los terrenos del convento ocupaban lo que hoy es la calle López Gómez, casi hasta la calle del Santuario. Por lo tanto, fue necesario tomar parte de estos terrenos para comenzar la construcción de la calle desde la parte del Campillo de San Andrés.

Además, se requirió tomar terrenos del Convento de la Encarnación de Clérigos Menores, que se encontraba en el espacio donde ahora está el colegio La Salle y otros edificios. La iglesia estaba ubicada en la calle Fray Luis de León, en lo que hoy sería la esquina con López Gómez.

La Iglesia de la Piedad también ocupaba parte de la calle López Gómez, específicamente en el tramo entre esta calle y Arribas. Esta iglesia, inaugurada como ermita propia por la Cofradía de la Piedad en 1662, fue declarada ruinosa en 1789 y derribada en 1791. Sus terrenos se utilizaron para la nueva calle. Desde la calle Arribas, se tomaron terrenos del antiguo Seminario Conciliar para conectar la parte final de la calle con la Plaza de la Universidad. La calle finalmente se completó y se inauguró en 1896.

La calle recibió el nombre de «calle de López Gómez» en honor a Manuel López Gómez, quien fue catedrático de la Universidad de 1851 a 1888 y también se desempeñó como Rector de la Universidad, concejal, senador y miembro de la Real Academia de Bellas Artes. Nació cerca de la calle y falleció en su casa de la calle Fray Luis de León el 7 de septiembre de 1893. Cuando se abrió la calle, ya existían algunas casas del siglo XVIII y XIX, pero eran simples, con una o dos alturas como máximo. Con el tiempo, la Plaza de la Universidad y la Plaza de España comenzaron a adquirir importancia, y la clase alta comenzó a fijarse en esta calle para vivir. En el siglo XX, se construyeron muchas de las casas actuales, algunas de las cuales destacan por su arquitectura.

La calle López Gómez ha experimentado cambios a lo largo de los años, y en la actualidad, la acera izquierda desde la Plaza España está dominada por edificios modernos de gran altura, mientras que la otra acera ha conservado edificios antiguos y atractivos. Esta calle es una parte importante de la historia y la vida cotidiana de Valladolid, que ha evolucionado a lo largo de los años para reflejar los cambios en la ciudad y su comunidad.